La compra de un tractor agrícola es una de las decisiones más importantes para cualquier agricultor o explotación agrícola. Elegir el modelo adecuado según el tipo de cultivo, extensión de la finca y características del terreno marcará la diferencia en términos de rentabilidad, eficiencia y durabilidad.
Tipo de cultivo:
Para cultivos de olivar o viñedos, se recomiendan tractores estrechos y maniobrables.
En cultivos extensivos (cereales, girasol), son ideales tractores de mayor potencia y capacidad de tracción.
Para invernaderos, se requieren tractores compactos y de baja altura.
Terreno y orografía:
Terrenos inclinados o accidentados necesitan tractores con bajo centro de gravedad y excelente estabilidad.
Para suelos blandos o arenosos, tractores con ruedas anchas y buen sistema de tracción.
Potencia y cilindrada:
Para pequeñas explotaciones, motores entre 50 y 80 CV son suficientes.
Explotaciones medianas requieren entre 80 y 120 CV.
Grandes explotaciones y cultivos extensivos, tractores de más de 150 CV.
Transmisión y tecnología:
La transmisión hidráulica o CVT facilita el trabajo y mejora la precisión.
Sistemas GPS y agricultura de precisión son recomendables para grandes fincas.
Realiza una prueba de campo.
Verifica la disponibilidad de servicio técnico y recambios.
Infórmate sobre las ayudas y subvenciones vigentes.
Valora la posibilidad de financiar o alquilar maquinaria.
Elegir el tractor agrícola perfecto no es solo una cuestión de precio, sino de adaptabilidad y rendimiento. Un buen asesoramiento profesional y la elección adecuada garantizarán una mayor vida útil del equipo y mejores resultados en la producción.
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